Ella pagó todo sospechosamente en efectivo durante años, y luego la gente se dio cuenta del porqué

5. Una amiga

Neff se dio cuenta rápidamente de que Anna Delvey no era una huésped que necesitaba su información, sino que quería su tiempo. Ella quería tener una amiga en el hotel y eso es exactamente lo que obtuvo. A medida que Anna y Neff se acercaban más y más, también lo hacía el peligro.

«Sólo te sientas y escuchas, porque así es tu vida como conserje», recordó Neff más tarde. La interacción con los huéspedes no era algo ajeno a ella, pero por primera vez continuaba siendo amiga de un huésped fuera de las horas de trabajo. Al poco tiempo, comenzaron a ir juntas a restaurantes y clubes.