Esta pareja hizo una apuesta: nada de comer afuera, nada de comida chatarra, nada de alcohol. Un año después, así es como se ven

9. La vida marital

Había pasado un año de matrimonio en un abrir y cerrar de ojos, y nada había cambiado. La pareja aún pasaba su tiempo libre frente al televisor, mientras comían alimentos que por lo general eran procesados y poco saludables. Entonces, algo comenzó a cambiar.

Sentía como si las cosas estuvieran fuera de control para ella. El instinto de supervivencia de Lexi le decía que algo tenía que cambiar, pero no sabía por dónde empezar. Y a pesar de todo, ella nunca perdió la esperanza. Nunca. Ella tuvo que ser fuerte. Y poco sabía ella que su ansiado cambio llegaría de manera casual y terminaría cambiando su vida para siempre.

10. Propósito de año nuevo

La idea de que necesitaban comenzar a vivir un estilo de vida más saludable, por su propio bien, se volvió una constante en la mente de Lexi. Es por eso que en el Día de Año Nuevo en el 2016, Lexi decidió comenzar a hacer algunos cambios en su vida, cambios que además beneficiarían su salud.

Como en todo matrimonio, Lexi no estaba sola. Afortunadamente, ella tenía a su esposo a su lado para apoyarla. Pero inicialmente, él no le dio importancia a la idea en lo absoluto. Fue necesario convencerlo para que se uniera al propósito de año nuevo de su esposa.

11. Un cambio de corazón

«Al principio, la idea no sonaba muy bien para mí, porque siempre fue bueno ir a casa, sentarnos, comer y no tener que preocuparnos por nada», dijo Danny. Pero siendo un esposo amoroso, no iba a permitir que Lexi asumiera el reto sola.

«Es un año nuevo y algo en lo cual trabajar, mientras ayudo a Lexi también», exclamó Danny después de tener un ligero cambio de opinión. Él sabía en el fondo que, en cuanto a la salud, era lo mejor para ambos.

12. Una apuesta entre amigos

Al enterarse del propósito de Año Nuevo de la pareja, algunos de los amigos de Lexi y Danny quisieron hacer una apuesta con ellos. La pareja hizo un trato en el que pasarían un mes siguiendo unas pocas reglas básicas: «nada de comer fuera, nada de refrescos, nada de alcohol alcohol, nada de comida chatarra, y entrenar durante 30 minutos cinco veces a la semana».

Lexi y Danny estaban listos para el desafío y decidieron probarse a sí mismos que podían hacerlo, y que tenían el autocontrol necesario para cambiar sus hábitos. Este fue solo el comienzo de su largo viaje hacia una vida feliz y saludable.